¿Cuáles son las frutas de invierno?

La naturaleza es sabia y en cada temporada produce lo que más necesitamos. Las frutas de invierno están llenas de vitamina C para proteger nuestras defensas y hay algunas que hasta podemos preparar calientes.

Aunque hoy en día puedes encontrar cualquier tipo de fruta durante todo el año, hay muchos motivos por lo que es recomendable consumir fruta de temporada y de proximidad:

• Es más nutritiva porque para que una fruta procedente de otro continente llegue en buen estado óptimo a tu hogar tendrá que recogerse antes de que esté madura y completar su maduración durante el viaje, y este proceso hace que pierda gran cantidad de sus nutrientes.
• Está más buena porque no ha pasado por cámaras frigoríficas ni largos viajes que alteran su textura y sabor.
• Es más ecológica porque para cultivar una fruta fuera de su temporada se tiene que crear un entorno artificial, con todo el gasto de agua y energía que eso supone, o se transporta desde miles de kilómetros, produciendo una gran contaminación con ese transporte.
• Es más barata porque al haber más género y ahorrarnos el transporte desde otras zonas, los precios de los productos en temporada siempre serán más reducidos.

Si consideramos desde finales de diciembre hasta finales de marzo, los meses del invierno, estas son las frutas de temporada de las que podrás disfrutar:

Naranjas, mandarinas, clementinas y pomelos

Los cítricos son los reyes indiscutibles del invierno y en nuestro país tenemos una producción buenísima. De hecho, nuestro país, y en concreto Valencia, es el mayor productor de toda Europa. Nos ayudan a reforzar nuestras defensas y protegernos de los resfriados gracias a su gran contenido en vitamina C. Además, contienen un potente antioxidante, los carotenoides, que son los que les proporcionan el color anaranjado, y mucha fibra y potasio. Mejor tómalos enteros, no en zumo, porque de lo contrario estarás desechando gran parte de sus nutrientes y tomando solo el azúcar que contienen.

Uvas

Se cuenta que en 1909 hubo un excedente de uvas en Alicante al finalizar el año y que los productores lanzaron una campaña para animar a la gente a consumirlas en Nochevieja diciendo que daban buena suerte, aunque no está claro que este sea realmente este el origen de la tradición porque hay registros de celebraciones de fin de año con las uvas como protagonistas desde 1880. Sea como fuere, las uvas son un clásico de nuestro invierno y una fruta ligera con muchos antioxidantes (especialmente la uva negra), fibra, vitamina C y sales minerales beneficiosas para nuestro organismo. Con un poco de queso y frutos secos es la merienda ideal.

Manzana

Las variedades reineta, golden y royal gala son las de temporada en invierno. Muy recomendables para las dietas por su gran poder saciante y sus bajas calorías, contienen además vitamina C y B, fósforo, potasio y calcio. Si te apetece un postre o una merienda calentita, puedes asar las manzanas con canela o hacerlas en compota.

Peras

Son ricas en fibras, vitaminas y ácido fólico. Al igual que las manzanas, puedes prepararlas en recetas calientes, como las peras al vino, ¡pero no les eches azúcar de más!

Caqui

También se cultiva en la región de Valencia e, incluso, se ha desarrollado una variedad autóctona, el Persimón. Aunque contiene más azúcar que el resto de frutas y, por lo tanto, su consumo en caso de estar a dieta debe ser moderado, el caqui también es una fruta muy nutritiva y diurética.

Chirimoya

La Costa Tropical de Granada es el primer productor comercial de chirimoya a nivel mundial, aunque casi toda la producción la consumimos en España. Contienen vitamina A, C y B, fósforo, potasio, calcio, magnesio, hierro y zinc.

Granada

Su temporada comienza en octubre y finaliza con el año, así que tendrás que darte prisa. Es rica en vitaminas C, B2 y B9 y minerales como el zinc, el selenio, el cobre o el hierro, entre otros. Es una fruta muy versátil, puedes consumirla como postre sola o echándosela al yogur natural o acompañar con sus granos tus ensaladas.

Membrillo

Una fruta muy popular en tiempos de nuestros abuelos pero no tanto en la actualidad y que conviene reivindicar. Contiene muy pocos azúcares, es astrigente y rico en fibra. Cocínalo con canela, matalauva, clavo y una cucharada de azúcar de caña y tómalo calentito.

¡Ya no tienes excusa para tomar fruta todo el año!