¿Qué es el sedentarismo? Concepto y cómo combatirlo
La vida en las ciudades cada vez deja menos espacio para la actividad física: nos desplazamos en coche o transporte público, pasamos toda la jornada frente a un ordenador en la oficina y volvemos a casa tan cansados que lo único que hacemos es tirarnos en el sofá frente al televisor. Más aún ahora, con la crisis del coronavirus, que ha obligado a muchos a trabajar desde casa eliminando el ejercicio que podíamos hacer en este desplazamiento.
Y es que esto es precisamente el sedentarismo, un estilo de vida que incluye muy poca actividad física y un escaso consumo de energía. De hecho, esta palabra proviene del latín sedentarius que significa “que trabaja sentado".
Este tipo de rutina por común no es menos peligrosa. El sedentarismo es uno de los principales factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares y la causa más frecuente de la obesidad. Además afecta a nuestro cuerpo negativamente en muchos otros aspectos:
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Se pierde masa muscular al no ejercitar los músculos.
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Se debilitan los huesos, lo que puede llevar a enfermedades como la osteoporosis.
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Se ralentiza el metabolismo dificultando la síntesis de grasas y azúcares, lo que puede llevar a una subida del colesterol y a sufrir diabetes.
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La circulación sanguínea empeora y aparecen desde varices a problemas cardiovasculares graves.
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Provoca contracturas y dolores de espalda y cuello.
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Favorece la ansiedad, la depresión y el insomnio.
De hecho, un estilo de vida sedentario puede afectar a nuestra salud incluso aunque hagamos ejercicio en algún momento de la semana: se ha demostrado que pasar más de 6 horas seguidas sentados aumenta el riesgo cardiovascular aunque se haga deporte. Por eso, es muy importante tener en cuenta unas pautas que nos ayudarán a aumentar nuestra actividad diaria hasta hacerla cotidiana. Más allá de la actividad deportiva, lo que nos va a ayudar a combatir el sedentarismo es cambiar nuestros hábitos diarios, así que apúntate estos trucos y empieza a practicarlos desde hoy:
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En el trabajo, ponte una alarma que suene a cada hora en punto y oblígate a levantarte de la silla en ese momento. Da una vuelta por la oficina o por casa, ve a por un vaso de agua o aprovecha para hablar con alguien.
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Siempre que te llamen o llames desde el móvil, levántate y camina mientras hablas.
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Usa las escaleras en lugar del ascensor siempre que sea posible.
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Planifica las salidas de casa con tiempo suficiente para poder hacer el camino andando.
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Cronometra lo que tardas en hacer las tareas del hogar (barrer, fregar, quitar el polvo,...) y rétate hacerlas a mayor velocidad cada vez.
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No te sientes cuando lleves a tu hijo al parque, aprovecha para jugar con él todo ese rato.
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Usa alguna aplicación o dispositivo que cuente tus pasos y márcate un objetivo de al menos 10.000 pasos.
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Introduce alguna actividad deportiva poco a poco en tus rutinas. En nuestro blog encontrarás una serie de ejercicios, tanto para ejercitar glúteos como de entrenamiento rápido HIIT, para que puedas hacer fácilmente en casa sin necesidad de material.
Ya ves que ni la falta de tiempo ni tu modo de vida son excusas para el sedentarismo. Anima a tu familia y compañeros de trabajo a adoptar estas prácticas saludables y así os ayudareis unos a otros a no olvidarlas.
En poco tiempo notarás cómo tu cuerpo se siente mejor, te cansarás menos, dormirás mejor y desaparecerán los dolores musculares. ¡Verás que merece la pena el esfuerzo!