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¿Qué alimentos bajan la tensión?

¿Qué alimentos bajan la tensión?

La hipertensión arterial es un importante factor de riesgo para sufrir una enfermedad cardiovascular. La tensión puede subir y bajar por causas puntuales, como una situación de estrés o por el calor, pero cuando de forma continuada superamos los 140 mm de Hg (mercurio) de presión sistólica y los 90 mm de Hg de presión diastólica, se considera que sufrimos de hipertensión. 

Entre las causas que provocan la hipertensión están algunas ajenas a nuestra voluntad como son el estrés o algunas enfermedades renales o endocrinas. También el consumo de ciertos fármacos, como, por ejemplo, los efervescentes que contienen sodio. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la hipertensión es causada por un estilo de vida sedentario, el abuso de alcohol o tabaco, el sobrepeso y una mala alimentación.

 

 Alimentos que bajan la hipertensión

Una dieta enfocada a controlar las subidas de tensión arterial tendrá dos objetivos principales: reducir el sobrepeso (en caso de que lo hubiera) y reducir el consumo de sal. 

La presión arterial se reduce aproximadamente 1 mm de Hg con cada kilogramo de peso que pierdes. Además, el sobrepeso puede provocar apnea del sueño, lo que aumenta aún más la presión arterial.

Por otra parte, la sal o sodio presente en algunos alimentos puede provocar retención de líquidos y, con ello, aumento de la presión arterial.

Teniendo en cuenta estos dos objetivos, estos son los alimentos que mejor podrán ayudarte a mantener a raya tu presión arterial:

  • Ajo y cebolla: 

Ambos favorecen la dilatación de los vasos sanguíneos y mejoran la circulación.

  • Legumbres: 

Son ricas en calcio, un mineral que contribuye a mejorar la calidad de las paredes arteriales.

  • Plátano: 

Esta fruta contiene hasta el 12% del potasio que se necesita a diario. Este mineral es muy importante para bajar la tensión arterial porque cuando nos falta, nuestro cuerpo empieza a retener sodio, con el consiguiente aumento de la tensión. 

  • Apio: 

Mejora la circulación gracias a un compuesto que relaja los músculos que hay alrededor de las arterias y dilata los vasos sanguíneos. Además, tiene un efecto diurético y, a través de la orina, eliminamos el exceso de sodio de la sangre.

  • Alcachofa: 

Este vegetal combina los efectos beneficiosos del potasio y la fibra en su composición, a la vez que es un potente diurético, lo que lo convierte en el alimento estrella para el control de la hipertensión. Se recomienda tomarlas dos o tres veces por semana. También puedes consumirlas en forma de complemento alimenticio sin perder ninguna de sus cualidades.

  • Yogur natural: 

Una fuente natural de calcio y un probiótico que equilibra nuestra flora intestinal, algo esencial para mantener la tensión también equilibrada.

  • Frutos del bosque: 

Los arándanos, moras, frambuesas, grosellas y otros frutos rojos contienen antocianinas, un tipo de antioxidantes que además de proporcionarles su característico color tienen propiedades cardioprotectoras. Además son diuréticas y ricas en fibra.

Alimentos que aumentan la hipertensión

Más importante aún que conocer cuáles son los alimentos que te ayudan a bajar la tensión, es evitar aquellos que la disparan. Estos son los alimentos que deberás erradicar o reducir en tu dieta si tienes tendencia a la hipertensión:

  • Sal: 

Un adulto no debería consumir más de 2.300mg de sodio al día, lo que corresponde a una cucharadita de sal. Teniendo en cuenta que muchos alimentos contienen ya sodio en su composición, el uso de este condimento debería reducirse a la mínima expresión en el caso de los hipertensos. Usa, en su lugar, hierbas aromáticas o especias para saborizar tus platos.

  • Alimentos procesados: 

Los embutidos, quesos, conservas y otros productos procesados contienen una gran cantidad de sodio que se añade durante el procesamiento, por lo que están prohibidos en las dietas para hipertensos. 

  • Alcohol: 

Aunque los flavonoides del vino pueden mejorar la circulación sanguínea, beber en exceso sube considerablemente la tensión y, además, reduce la eficacia de los medicamentos destinados a controlarla.

  • Cafeína: 

No están claros los efectos de la cafeína sobre la presión arterial a largo plazo pero sí se observa un considerable aumento en las personas no la toman habitualmente. Modera tu consumo de café a un par de tazas al día en cualquier caso. 

  • Grasas saturadas: 

Aumentan el colesterol malo que afecta a nuestras arterias y son las principales responsables del sobrepeso. Si sufres de hipertensión, olvídate de las mantequillas, tocinos, carnes procesadas y grasas, quesos amarillos, helados, bollería y snacks industriales.

Recuerda que el mejor tratamiento y prevención de la hipertensión es una vida activa y una alimentación saludable, ¡no lo dejes para mañana y empieza desde hoy a cuidarte!