5 propiedades beneficiosas del açaí
El açaí, la fruta brasileña de moda en Instagram, tiene buenos motivos para haber asaltado los desayunos y brunchs de expertos en nutrición. Seguro que ya has visto alguna foto de un apetitoso bowl cubierto de frutas y semillas bajo las que se asienta una especie de crema de color morado. Esta crema, de textura similar a la de un helado un poco derretido, no es otra cosa que açaí mezclado con leche o queso fresco batido. Y no solo es fotografiable y delicioso, también es muy nutritivo.
Esta pequeña fruta de color morado, similar en aspecto a los arándanos, procede de la selva norte de Brasil y lleva consumiéndose desde hace siglos entre las tribus indígenas amazónicas. Podríamos describir su sabor como una mezcla de chocolate y frambuesas… totalmente adictivo.
El açaí es una gran fuente de fibra y proteínas (tiene más que el huevo), además de vitaminas A, B y C, aminoácidos, sales minerales (calcio, zinc, magnesio, hierro y potasio), flavonoides y ácidos grasos Omega-3.
Beneficios del açaí
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Reduce los efectos del envejecimiento
El característico color morado del açaí procede de su alto contenido en flavonoides, un potente antioxidante también presente en las uvas pero cuyo contenido en el açaí se llega a multiplicar por 30. Los antioxidantes ayudan a combatir los radicales libres y con ello, a retrasar el envejecimiento de nuestras células y a reducir la incidencia de algunos tipos de cáncer.
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Regula el tránsito intestinal y nos ayuda a perder peso
Su alto contenido en fibra (un 40%) es el responsable de su beneficiosa acción para prevenir el estreñimiento y cuidar de nuestro sistema digestivo. Además, la fibra tiene un efecto saciante y favorece la reducción de grasa corporal al estabilizar los niveles de azúcar en sangre.
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Reduce el colesterol y protege nuestra salud cardiovascular
El açaí es rico en ácidos grasos Omega-3 pero también 6 y 9, todos ellos esenciales para procesar otros lípidos, como las lipoproteínas de baja densidad (LDL) o colesterol malo. Esto, unido a su fibra y antioxidantes, ayuda también a mejorar la circulación y protegernos frente a enfermedades cardiovasculares.
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Refuerza tus defensas
El ácido elágico que contienen las bayas de açaí ayudan a combatir bacterias y virus. También modula la actividad de los linfocitos y evita que nuestro sistema inmune caiga.
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Es energizante y afrodisíaco
Se trata de un alimento ideal para deportistas y personas con una gran actividad física porque contiene una gran cantidad de proteínas que, además, al ser vegetales, son más fáciles de asimilar por nuestro organismo. Ese chute de energía que aporta le ha valido su tradicional fama de afrodisíaco en Brasil, donde se la conoce como “viagra natural”. También ayudan a esta reputación su capacidad de reducir el cortisol, la hormona que genera el estrés, y de liberar dopamina y serotonina, las hormonas del placer y la felicidad.
Cómo tomar açaí
El açaí es un fruto bastante delicado que necesita una buena refrigeración para conservar todas sus propiedades nutricionales. Por eso, es complicado que llegues a encontrarlo aquí fresco. Sin embargo, sí que podemos encontrar su pulpa congelada, en formato polvo, en zumos o alimentos preparados, o en comprimidos que aprovechan sus propiedades terapéuticas.
Si te decides a probarlo en su versión “más natural”, es decir, congelado o en polvo, la clave está en mezclarlo con una base que le de textura pero no encubra su sabor. Puedes utilizar algún tipo de leche vegetal, yogur natural o queso fresco batido. También puedes añadirlos a zumos, smoothies o hacer infusiones para aprovechar todo su potencial nutricional.
