Naturblog
Información nutricional, recetas y consejos Naturhouse para mejorar tu alimentación y tener un estilo de vida saludable.

6 propiedades de las semillas de cáñamo

6 propiedades de las semillas de cáñamo

El cáñamo es una planta que ha provisto numerosos productos y beneficios a la Humanidad a lo largo de la historia. Sin embargo, tiene asociada una injusta mala fama por su confusión con la marihuana. Aunque las dos proceden de la misma familia, la cannabis sativa, la variedad del cáñamo que se usa en la industria y en la alimentación contiene muy poco tetrahidrocannabinol (THC), el componente psicoactivo que hace de la marihuana una droga recreativa y medicinal.

La fibra del cáñamo se lleva utilizando para elaborar tejidos y cuerdas desde el siglo V A.C., y ha sido especialmente significativo su uso en la navegación, ya que por su resistencia ha servido como materia prima para confeccionar velas de barcos, redes de pesca, cuerdas y cabos. En la actualidad, sus aplicaciones están creciendo y se ha convertido en una alternativa ecológica a productos dañinos para el medio ambiente. Así, hoy en día, encontramos biocombustibles, bioplásticos, papel, materiales de construcción, pinturas y barnices,... todos hechos con cáñamo.

Valor nutricional de las semillas de cáñamo

Una de las aplicaciones del cáñamo que más está creciendo es la relacionada con el bienestar y la alimentación. La riqueza nutricional del aceite y las semillas de cáñamo es tal que se les considera superalimentos. 

Las semillas de cáñamo son el alimento con mayor valor proteico que existe en el reino vegetal (el 34% de su contenido son proteínas) y también con mayor cantidad de ácidos grasos omega 3 y omega 6. Además, contienen los nueve aminoácidos esenciales, es decir, aquellos componentes que nuestro organismo necesita para producir proteínas y reparar tejidos pero que solo podemos obtener de los alimentos. También son muy ricas en magnesio y hierro, en vitaminas del grupo B y vitamina E, que son potentes antioxidantes. Por último, proporcionan un gran aporte de fibra, ya que el 35% de su peso corresponde a este nutriente.

Por todo ello, se considera que las semillas de cáñamo son el mejor alimento que se puede obtener de una planta.

Principales beneficios de las semillas de cáñamo

  1. Mejoran la salud cardiovascular

Las semillas de cáñamo reducen los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre y, además, contienen arginina, un aminoácido que esencial para la dilatación de arterias y venas, lo que contribuye a la salud de los vasos sanguíneos y previene frente a los coágulos. 

  1. Protegen frente al envejecimiento celular

Los fitoquímicos presentes en su composición nutricional actúan frenando la acción de los radicales libres sobre las células, lo que previene frente a enfermedades relacionadas con el envejecimiento celular, como el Alzheimer, el Parkinson y algunos tipos de cáncer.

  1. Previenen la artritis y el reumatismo

Las semillas de cáñamo son ricas en fósforo y calcio, dos minerales esenciales para la salud de nuestros huesos. Por otra parte, este alimento mejora nuestro sistema inmunitario, algo esencial para la artritis reumatoide, ya que se trata de una enfermedad autoinmune.

  1. Ayudan en las dietas de adelgazamiento

Son un buen apoyo si estás a dieta porque, gracias a su gran cantidad de fibra, las semillas de sésamo te sacian, además de ayudarte a ir al baño con más regularidad. Además, tienen muy pocos hidratos de carbono y muchas proteínas fácilmente digeribles.

  1. Alivian los los trastornos premenstruales y de la menopausia

Su contenido en beta-sitosterol, un fitoestrógeno, las convierte en un gran aliado para las mujeres en todas las fases de su vida, ya que disminuye la irritabilidad, depresión y retención de líquidos asociados al síndrome premenstrual y reduce los trastornos derivados del climaterio. 

  1. Previenen la anemia

Las semillas de sésamo son ricas en hierro, un mineral esencial para la formación y funcionamiento de los glóbulos rojos, cuya escasez es la responsable de la debilidad muscular y la fatiga propios de la anemia.

Prueba a mezclarlas con tu yogur, añadirlas a una ensalada como haces con los frutos secos (de hecho tienen un sabor similar a las nueces) o ponerlas como topping en tu crema de verduras. ¡No te defraudarán!