6 propiedades de las flores de saúco
Las propiedades de las flores de saúco son muchas: te ayudan a bajar la fiebre, tienen efectos diuréticos y mucho más. ¡Descúbrelas!
El sambucus o saúco es un arbusto o árbol bajo que crece en las regiones templadas de ambos hemisferios. Sus pequeñas flores blancas, que abren a finales de primavera, son muy apreciadas por su carácter medicinal, especialmente por sus beneficios sobre el sistema respiratorio.
Su contenido en aceites esenciales, ácidos orgánicos y su abundante vitamina C hacen de las flores de saúco un remedio a tener en cuenta en las épocas invernales.
Beneficios de las flores de saúco
-
Alivian las infecciones respiratorias
La sambucina, principal principio activo del saúco, ayuda a bajar la fiebre, eliminar los virus y aliviar la tos en gripes, resfriados, bronquitis y otras enfermedades respiratorias.
-
Son depurativas y diuréticas
Su alto contenido en sales potásicas ayuda a nuestro cuerpo a eliminar líquidos a través del aumento de la sudoración y de las ganas de orinar. Esto produce dos efectos beneficiosos para nuestro cuerpo: por una parte, nos sirve para reducir volumen y es un complemento ideal para las dietas de adelgazamiento; por otro, activa la eliminación de toxinas, bacterias y residuos de nuestro organismo, lo que especialmente importante en caso de sufrir gota (ayuda a eliminar el ácido úrico), hipertensión (ayuda a eliminar el sodio) o piedras en el riñón.
-
Previenen la cistitis
Las flores de saúco tienen un efecto drenante, es decir, estimulan la micción, lo que nos ayuda a expulsar de la vejiga las bacterias que causan la cistitis. Se recomienda su uso como complemento del tratamiento médico para acelerar su curación.
-
Estimulan la lactancia
Las flores secas tienen un olor y sabor muy agradable y suelen mezclarse con otras flores y hierbas para hacer tisanas. Su infusión se ha usado tradicionalmente como galactógeno, es decir, como estimulador de la leche materna.
-
Cura infecciones de garganta, encías, ojos y oído
Otra de sus interesantes propiedades es que son antisépticas y bactericidas. Podemos usar una infusión de flores de saúco concentrada para hacer gárgaras y aliviar las anginas o la inflamación de encías. Esta misma infusión empapada en una gasa y aplicada sobre los ojos sirve para tratar la conjuntivitis del mismo modo que la manzanilla. En caso de que la infección esté en el oído, se recomienda taparnos la cabeza con una toalla sobre la infusión y dejar entrar el vapor por el conducto auditivo.
-
Relaja y cuida la piel
Un baño de flores de saúco no solo es un placer sensorial sino que su perfume actúa como relajante y los principios activos de la flor suavizan y calman la piel, desinflama los pies, curan rozaduras y ayudan a eliminar manchas.
Precauciones con el saúco
El arbusto del saúco tiene varias partes venenosas, con componentes que generan cianuro. Por eso, hay que tener mucha precaución a la hora de consumirlo.
Mientras las flores y los frutos maduros y cocinados son seguros, otras partes como las semillas, la corteza, las raíces y las bayas inmaduras crudas contienen sambunigrina, un glucósido en el organismo se transforma en cianuro, que es altamente tóxico. Además, la corteza y el tallo contienen también lecitinas, muy tóxicas para el feto en caso de embarazo.
Existen remedios antiguos que usan decocciones de la corteza, las hojas o los frutos inmaduros y crudos de esta planta, pero se ha demostrado que estas partes son extremadamente tóxicas y se desaconseja su uso por completo. De hecho, el simple contacto de la piel con las hojas puede producir dermatitis.
Además, hay una especie llamada yezgo o sauquillo que suele confundirse con el saúco y también es tóxica. Su aspecto es muy similar aunque sus hojas son más alargadas y desprende un olor desagradable.
Por todo ello, se recomienda tomar saúco solo a través de fuentes fiables, como este jarabe de flores de saúco depurativo y diurético, elaborado a partir de extractos naturales cuidadosamente seleccionados por nuestros expertos.